"Miguel Se Dio Cuenta de Que Su Suegra No Era Tan Mala Después de Todo - Pero Lidiar con Su Esposa Era Otra Historia"

«Miguel Se Dio Cuenta de Que Su Suegra No Era Tan Mala Después de Todo – Pero Lidiar con Su Esposa Era Otra Historia»

Miguel se sentó en un banco del parque, masticando un donut rancio. Debía ser del día anterior, ya que los bordes estaban casi tan duros como una roca. Todos saben cómo va; las tiendas siempre intentan deshacerse del stock viejo. Pero a un hombre hambriento no le importa. Simplemente saboreaba el sabor del glaseado y reflexionaba sobre la vida. Las palomas locales observaban cada uno de sus movimientos sin parpadear, por si acaso él