«Abuelo, ¿Por Qué No Quieres Que Vivamos Mejor?» Preguntó Su Nieta
Hace solo unos meses, Juan no podía ni pensar en la tranquilidad. Sus familiares lo llamaban cada 10-12 horas. Su propia hija, su esposo y sus hijos estaban luchando, y Juan sentía el peso de sus problemas sobre sus hombros.