¿Es Alejarse la Única Opción que Queda? Mi Corazón No Puede Decidir

¿Es Alejarse la Única Opción que Queda? Mi Corazón No Puede Decidir

Mi marido, Andrés, siempre ha sido el sostén económico, compartiendo generosamente su riqueza y asegurando nuestro confort. Sus contribuciones financieras facilitaron mi vida. Sin embargo, nuestra relación tomó un giro cuando el trabajo de Andrés comenzó a exigirle viajes frecuentes. A pesar de ser respetado por sus habilidades profesionales, Andrés luchaba con las conexiones personales, y sus prolongadas ausencias me hicieron cuestionar nuestra vida familiar. Cuando recibió una oferta de trabajo permanente en otro lugar, mi dilema se profundizó.